Crónica de Alba Salgado Fernández
Empezamos
la clase del sábado con una de esas pocas preguntas en las que la unanimidad
reina en la clase sin dar lugar al más mínimo debate: “¿Podríamos vivir sin internet
actualmente?” La respuesta, obviamente, un NO. No, al menos, tal y cómo
concebimos la vida actualmente. Que internet ha pasado a ser una parte vital de
nuestra vida cotidiana es algo bastante aceptado, sin embargo, tal vez no
seamos conscientes de hasta qué punto dependemos de él.
Cómo
hemos llegado a este momento que algunos llaman de HIPERCONECTIVIDAD
(debido a la constante conexión a diversos dispositivos) se debe, según los
autores Rainie y Wellman, a una triple revolución: INTERNET, COMUNICACIÓN
MÓVIL Y REDES SOCIALES.
-Internet,
la gran revolución de nuestras vidas. Que su uso va en aumento día a día no es
ningún secreto, y que se estima que siga haciéndolo en los próximos años sólo
es cuestión de lógica: se espera que países en desarrollo se vayan incorporando
en el futuro aumentando así la cifra del ya 44% de la población mundial que
accede a Internet.
-La
Comunicación Móvil es la gran culpable de la hiperconectividad:
accedemos a Internet constantemente a través de nuestros dispositivos móviles o
tablets, tanto que este año han desbancado por primera vez al tradicional
ordenador de sobremesa o portátil. Muchos nos sorprendimos al conocer la media
diaria de veces que consultamos internet a través del móvil, ya que la mayoría
de las veces ni siquiera somos conscientes.Y es que sin darte cuenta, cada vez
que tienes un pequeño hueco, mientras esperas el autobús o en la cola del cine,
aprovechas para consultar las últimas noticias o lo que han escrito tus
contactos en facebook. Son los llamados MICROMOMENTOS, un nicho
en el que las empresas se pueden y se deben colar para llegar a sus potenciales
clientes.
-Por
último, las Redes Sociales también han supuesto un gran cambio y el paso
a lo que se conoce cómo universo 2.0. Hoy en día y gracias a estas
herramientas, cualquiera puede escribir un mensaje y hacerlo llegar a todo el
mundo. Las Redes Sociales tienen ciertas particularidades a destacar: son
participativas, abiertas - cualquiera puede acceder a ellas a través de
Internet-, permiten conversaciones y crean comunidad.
Llevando
esta revolución al ámbito empresarial, el panorama también ha cambiado de
manera significativa. Antes las marcas se publicitaban a través de sus anuncios
en varios soportes sin ningún tipo de feedback; ahora pasan a ser lo que la
comunidad dice de ellas, y no lo que sus anuncios pretenden mostrar. Los usuarios
pueden ahora crear contenidos, dar sus opiniones, sus bendiciones y sus quejas,
y una vez publicadas en Internet, son accesibles para cualquiera.
Expuesta
esta nueva realidad, parece obvia la necesidad de controlar y saber manejar
correctamente la Identidad Digital, es decir, cómo nos presentamos a
través de las distintas redes sociales y la imagen de nosotros mismos que
queremos proyectar.
El
primer paso, es pensar qué es lo que queremos transmitir, hacer una previsión
de nuestros objetivos, y en base a eso, comenzar nuestra andadura. Una vez
tengamos claro esto, será más fácil plasmarlo en nuestras redes sociales a través
de imágenes, comentarios, etc. El segundo punto importante es utilizarlas:
al igual que un jardín, de nada vale plantarlo y después olvidarse. Las Redes
Sociales necesitan un cuidado diario que, en este caso, se realiza a través de
su uso.
Es
importante también decidir si la identidad digital se crea desde el punto de
vista personal, profesional, o una mezcla de ambos. Esto dependerá
en gran parte de nuestro objetivo y en función de si pensamos que conviene una
opción u otra.
Hemos
tenido tiempo también en esta productiva mañana de sábado, para aprender
algunas normas básicas a la hora de participar en la red: usar siempre el tono
adecuado, ser honestos, practicar la tolerancia y la empatía y ser respetuoso
con los demás usuarios; en definitiva, y como en los demás aspectos de la vida,
aplicar el SENTIDO COMÚN. Y es que, cómo nos ha demostrado Natalia, los delitos
a través internet no tan quedan impunes como pudiese parecer.
Para
finalizar la clase, hemos repasado y comentado los diversos perfiles en redes sociales
de personajes públicos como Mariano Rajoy, Michelle Obama o Pablo Motos.
Y
hasta aquí mi resumen de lo que ha sido un enriquecedor primer acercamiento a
la Imagen Digital; aprovecho para deseados a todos un feliz puente de las
letras gallegas - en el que podéis probar a realizar un ejercicio de DES-CONEXIÓN,
y nos vemos en la próxima clase!! :)
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